Como habrás percibido,
la ausencia de rima en mi poema,
no es labor del olvido.
Lo cierto es
que al rimar camión
con contaminación,
trabajo con destajo
e incluso cabe carajo,
dónde coño meto el libre albedrío.
Político, cabrón.
Para revolucionarme necesito
inundar los ríos,
con libros que equiparen
mis textos a su moneda.
¿Y ahora cómo te quedas?
Pico el billete de curso ilegal
con mis tintas ilegales, por supuesto.
Mi libertad no cabe en una rima.
Así no puedo rimar ni queriendo.
E.M.G
Hola:)Me gustaria que visitaran mi blog,soy nueva,espero que les guste:
ResponderEliminarSecretosdemodaymas.blogspot.com
Muchas gracias y bonito blog:)